Sus caricias en mi piel incendiaron mi alma,
esa alma tan llena de sombras, de culpas...
Y él me ha dado todo en una noche...
No,
desde el momento en que cruzamos palabras me ha devuelto la vida....
No dejábamos de mirarnos entre bocados, creo que él rememoraba cada momento de la noche anterior, y de esta mañana. Sé que yo no pensaba en otra cosa, me sentía viva, feliz....y no debería, yo no debería sentir esta felicidad, era una grosería hacia....
-¿Luna? ¿Qué tienes?-preguntó, preocupado.
Mis bonitos recuerdos se vieron suplantados por otros más trágicos, y eso debió reflejarse en mi rostro. Le respondí que no pasaba nada y fui a mi dormitorio a por mi portátil, buena que me salió, no se rompió después que la lancé al piso hace unas noches; comencé a revisar las noticias en cuanto regresé, él se levantó y se dispuso lavar los platos. Llevaba puesta la camisa blanca y los pantalones ya secos, lo miré como si de un sueño se tratara, como si no estuviera allí en realidad y fuese un juego de mi imaginación.
Pero allí estaba, gracias a Dios allí estaba.
Su pelo negro muy corto, sus manos grandes que marcaron mi cuerpo con caricias que quedaron tatuadas en mí y que no se borrarían con nada. Sus ojos azules observándome y encontrando en mí...no sé qué...
Pero allí estaba, gracias a Dios allí estaba.
Su pelo negro muy corto, sus manos grandes que marcaron mi cuerpo con caricias que quedaron tatuadas en mí y que no se borrarían con nada. Sus ojos azules observándome y encontrando en mí...no sé qué...
Su
sonrisa invitando a la mía a reaparecer...
Su
voz a mí oído, diciendo mi nombre, susurrando palabras sucias y románticas como
si de la misma cosa se trataran... Y sé que en algún momento de anoche, también
lo hice...
Dio
media vuelta, yo volví a ver la pantalla del ordenador.
-El salón se
convirtió ayer en una versión de Cirque du Soleil.-comenté, viendo las
fotografías que habían subido a la página de la revista.-Debimos quedarnos un
poco más.
-¿En serio
lo crees?-preguntó, situándose detrás de mí para ver las imágenes,
levanté la cara para verle. Estaba sonriendo.-Mi noche estuvo perfecta, ¿y
la tuya?
Vi las fotografías otra vez, sentí sus labios en mi cuello, erizó mi piel al instante. Estaba tan sensible...
-Igual de perfecta que mi mañana.-susurré, besó muy quedo mis labios y se sentó en su sitio. Sé que me mira mientras veo las noticias, no pierde un instante para hacerlo.-Esto tiene que ser una broma.-dije, al encontrar un titular acompañado de una fotografía de la blonda más insoportable que he conocido.-Escucha:
>>"Sebastian y yo tenemos una relación de amistad muy cordial, lo sigo queriendo y el sentimiento es mutuo." Amanda Carlysle, hija del empresario y senador Matthew Carlysle estuvo presente en la deslumbrante celebración del séptimo aniversario de la revista Vesta. La célebre artista confirmó su reciente divorcio del fotógrafo y heredero del imperio Strauss, Sebastian...<<
-Blá, blá, blá... Aquí:
>>...Sobre la joven misteriosa que acompañaba a Sebastian, Amanda dijo: "Es Luna Giraldo, sobrina de Maura Giraldo. Una chica de mucha clase y distinción sin duda,-Hipócrita, pensé.-aunque no estoy segura de cuánto tiempo lleven conociéndose, creo que lucen muy apegados para ser de hace poco." "¿Insinúa usted que son pareja hace mucho?" Le pregunta el periodista.-dije, narrándole a Bastian.-A lo que tu ex mujer contestó: "Sebas no es infiel, aunque quién sabe ¿no? Siempre hay una primera vez, y no me extrañaría que haya sido ella quién lo buscó. Sebastian es muy asediado..."-Cerré la portátil, serena. Creo que Sebastian se esperaba otra cosa.-Tu ex mujer es un pan de Dios.
-No hagas caso a sus ofensas, ambos sabemos cómo se dieron las cosas, además ella no tiene mucho qué opinar. Lo que sí sé es que seguro vendrán a buscar tu respuesta a eso.
-Sin comentarios, no caeré en su juego; y no me siento ofendida. "Nadie puede hacerte sentir inferior sin tu consentimiento.."-le guiñé un ojo.
-Eleanor Roosevelt.-dijo él, devolviéndome el guiño.
Su móvil sonó, me dijo que era un mensaje de Paloma. Decía que me preguntara si aceptaba ir a almorzar con ella, yo asentí, que enviara el nombre del lugar donde nos encontraremos.
-Debo ir a mi apartamento a cambiarme, te paso buscando en un ratito para ir a la casa de modas en el centro. Debo revisar unas cosas por órdenes de tu tía, y ya luego veré qué hacemos tú y yo en este día.
-Es tan difícil encontrar cosas qué hacer, ¿no?-le dije, sentándome en su regazo.
-No me tientes, Luna.
-De acuerdo.-Me levanté y le tendí la mano.-Recoge tus cosas y vete.-Él empezó a reírse, yo había empezado a empujarlo por la espalda.-Nos vemos en un rato, cielo.-dije, abriendo la puerta.
Él depositó un beso en mi frente.
-Será una jodida tortura.-susurró, después de besar mi mejilla.-Si beso tu boca no me iré.-sonrió, mirando mis labios.
Lo empujé fuera y cerré la puerta, me quedé allí parada recargada en ella de espaldas.
¿Qué estoy haciendo?
Ser feliz, diría Maura...
Me preparé para esperar su regreso, a mí que no me gusta esperar. Porque la espera duele, porque la espera puede traer desilusión... Pero con él estoy aprendiendo algo, no me pertenece, el amor no significa que la persona amada estará atada a ti las veinticuatro horas del día, los siete días de la semana...
Amor significa libertad... No esclavitud... Es una "te pertenezco" pero distinto, es un "soy tuya" diferente a la definición que le dan muchos a la frase...
Oí que tocaron la puerta y fui, tardando todo lo que pude.
Nada más abrir sentí ganas de cerrarle la puerta en la cara a la persona que había llamado.
-Luna, buen día.-saludó la rubia con una sonrisa que me dio ganas de borrarséla de la boca.
-Eran.-dije.-¿Qué quiere?
-¿Puedo pasar?
-No, ¿qué quiere? Y no me haga repetir la pregunta, no me gusta.
Amanda suspiró, y asintió.
-Con respecto a lo que te dije anoche, quería disculparme-Y lo creí.-, mis acciones provocaron que lo perdiera a Sebastian. Pero debes entender que verlo contigo me puso muy mal, yo aún lo quiero...
-Y el sentimiento es mutuo ¿no? Sí, leí la nota.-agregué al ver su cara de sorpresa.-¿La prensa no sabe la razón por la que se divorciaron? ¿"Diferencias irreconciliables" fue el pretexto que usaron?-Amanda mostró esa mirada de cazador frente a su presa, su disculpa quedó en el olvido.-No quiero verla, señora. Y no acepto sus disculpas, y sus amenazas se las puede meter por allá por donde la espalda pierde su nombre.
-Estoy intentando redimirme, ¿y me tratas de este modo?
-No creo que exista otro modo de tratar con usted, Amanda, o cazo o me cazas. Y pienso estar atenta a cada movimiento que des, porque no me creo eso de "intento redimirme", hay personas que lo hacen y lo logran. Y después estás tú.
Le cerré la puerta en la cara.
Paloma dijo que no se fiaba ni de ella ni de su familia, y que yo debía tener cuidado. Sí, tal vez debí medir mis palabras e irme por las buenas con ella, pero en este caso era mejor estar en guardia que tener a tu enemigo cerca.
A Amanda no la quería a centímetros de distancia, ésa mujer tiene una mala vibra que se percibe nada más entra a una habitación.
Sebastian llegó en su coche. No le mencioné que Amanda había ido a visitarme, es más, encendí la radio apenas me subí al auto.
Cuando llegamos a la casa de modas de Maura me lo pensé varias veces antes de entrar.
El título en letras grandes y elegantes me paralizó las piernas: L&IG.... Yo estuve aquí cuando tenía dieciocho, con mi padre, en esa ocasión sólo estaban las letras LG, mis iniciales. La I que agregaron recién es en honor a mi hermana menor....
Contuve las lágrimas, y cogí la mano que Bastian me extendía.
Dentro me presentó a algunas personas, luego me llevó a la sala/pasarela donde encontramos a un hombre haciendo algunas fotografías a unas modelos.
Yo sabía bien quién era, y al verme él se mostró feliz. Una sonrisa iluminó su rostro.
-¡Luna!-exclamó, dejando la cámara a un lado.
Manuel Ruíz, uno de los predilectos de Maura.
Me cargó y yo lo abracé muy fuerte, él me había caído bien cuando le conocí en aquella ocasión. Al bajarme noté la expresión atónita de Bastian.
-¿Ustedes cómo....
-Hace cinco años más o menos, ella estuvo aquí y nos hicimos buenos amigos.-explicó Manuel.-Tú ibas saliendo de viaje el día en que ella llegó, pudiste encontrártela en la entrada....
Bastian y yo nos miramos, comprendiendo que pudo haber pasado, que tal vez tropezamos o nos pasamos por el lado.... Antes de que se casara con ella.... Antes de su matrimonio con Amanda...
Una mujer llegó por él, y me vi sola con Manuel, aún sorprendida.
-Siento mucho lo de tu padre y lo de tu hermana, Maura me mantuvo al tanto. Quise ir....
-No importa, estoy bien.-No, no lo estaba del todo.
Nos pusimos al día hasta que Bastian regresó, me despedí de Manuel y quedamos de vernos pronto.
Sebastian me cogió de la mano en el elevador, luego se paró frente a mí.
-No sabes cuánto lamento que no se diera el conocerte aquella vez.-dijo, sonrió a medias.
-Los encuentros se dan cuando deben darse, Bastian. No era nuestro momento.
-¿Entiendes que no estaba casado con Amanda en ese entonces?
-Lo entiendo, pero ahora me tienes, míranos. Hoy estamos juntos, y anoche me hiciste tu mujer, amor; el ahora es lo que me importa, este ahora aquí, a tu lado, en tu corazón.... En tu alma....
Me besó...y fue de esos besos que detienen el tiempo... De esos besos que te hacen recordar otras vidas junto a la persona a la que estás destinada....
De esos besos que sólo él sabe darme....
>>14 de diciembre de 2009
-Me voy a Roma y regreso a Nueva York en unos meses, madre.... Prometido.... ¡Joder! Mira por dónde vas....
-¿Y con esa boca le hablas a tu madre?<<
Qué rabia y desprecio me produce esta Amanda... no soporto a las personas que no son capaces de vivir y dejar vivir al otro.
ResponderEliminarMe ha dejado muy curiosa el final... y no veo la hora de continuar a leer!!!
Besosssss niña y y abrazo con el alma, como siempre.
Amanda... Amanda... ¿Qué haré con Amanda? A mí también me cae fatal, pero como es una villana ¡me encanta!
EliminarEse final, te daré una pista: No fue ni el principio de su (re)encuentro.... ;)
Un besazo, Almitaaaaa!!!!!!
El destino siempre caprichoso, los planetas siempre confabulándose, la divina providencia y como resultado: ella, él y el amor.
ResponderEliminarQué bonito, me encanta!!!
Mil besitos, Ivel.
Me ha gustado mucho eso que has dicho... El universo actúa de formas misteriosas ¡eh!
EliminarQue bueno que te encante.... Yo estoy feliz con esta historia...
Mil besitos, guapísima :*****
Ay... A Amanda la cogía de los pelos y la hacia un ocho... que mal me cae la tía por favor... se puede ser más mala... víbora... lagarta... Jum...
ResponderEliminarY ese destino... es cierto lo de los momentos, pienso que el momento llega cuando debe llegar, sin explicaciones, ni lógicas... y el final... por Dios? Qué es ese final? Qué pasa ahí? ese 14 de Diciembre....
Eres mala hermana, me has dejado más que intrigada... jajajajaja...
Quiero la continuación YAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA...... :p
Montones de besinos gordos y grandes y sonoros....
Y un achuchón... apreta'o...
Jajajaja ¡Sis Grande, calma que te va a dar algo! Respira, pero aún no sé si pueda lograr que la odies más aún... ¿Será que puedo? Ummm, creo que Amanda te dará sorpresas.... :@
EliminarComo dije arriba, ese 14 de diciembre no fue ni el inicio de su (re)encuentro... ;)
Creo que ando lenta con lo caps :( Ahí voy, ahí voy :P
Muchos besos para ti, hermana hermosa H!!!!!!! Abrazos a tu bella alma, cariño tq!!!!!!!