Huracán...

Todo implica un riesgo....

Y salvar a la sangre de tu sangre no era excepción...

No lo piensas dos veces...

Yo había tomado una decisión....

Y la familia siempre estará primero....

   Pedí el estudio para mí sola la mañana del viernes. 
   Había pasado un día entero desde la última charla con Amanda, y necesitaba drenar todo el estrés que tanta información había provocado.
   Bastian estuvo presto a ayudarme con el asuntito, pero su padre lo separó de mí todo el día antes, y yo fui a dormir a casa de Maura. Soren cuidaba de mí, Bastian cree que no me di cuenta que el grandullón me seguía a donde fuera; aún no he hablado con él, y ya le echo de menos.
  Bailar me ayudó un poco; no lograba terminar de asimilar la noticia sobre mi padre biológico, desde que mi memoria se restableció, el rostro de Phillipe Argent junto a mi madre era lo único feliz de todos mis recuerdos. No le pedí razones a Amanda sobre por qué nuestro padre biológico nos dejó, después de oírle decir que teníamos dos hermanos más  que conmigo hacíamos un perfecto cuadro de trillizos-¡Jo! Por ahí van dos personas que se asemejan a mí, y una es hombre-le dije a Bastian que ya había tenido suficiente. 

  Apagué el reproductor de música, cogí mis cosas y salì. Sentí que alguien me observaba mientras caminaba, al saber que Soren andaba cerca creí que era él hasta que oí que alguien me llamó por mi otro nombre. 
   Di media vuelta y me encontré con un hombre alto, de pelo castaño y corto, enfundado en un traje. Sonrió, mi primera reacción fue dar un paso atrás. 

-Luna Giraldo/Amara Argent, que gusto volver a verte al fin.-dijo y mi cara de haba debió ser un chiste porque rió.

-¿Cómo...?-Volví a dar un paso atrás, que supiera mi otro nombre no era buena señal.-Aléjese de mí.

-No tienes por qué temerme, bonita. Conozco a tu hermana, te conozco a ti, del instituto ¿recuerdas?-Su acento alemán se hizo más notorio.

-¿Y se supone que eso debería dejarme más tranquila?-Estuve a punto de salir corriendo, pero algo en aquél hombre me resultaba familiar.-Mi marido me ha puesto escolta, si me hace algo él no dudará en disparar.-Decir "mi marido" me hizo sentir un poco extraña aunque satisfecha. Bastian lo era todo para mí.

-Declan, ¿te suena el nombre?

   Lo mirè a los ojos y detallé su rostro, busqué en mis recuerdos llegando a la noche en que escapamos del instituto. El niño que ayudó a mi hermana a sacarme del ataúd.

-No puede ser.-susurré.

-Soy yo, pequeña. Y necesito que hablemos de Amanda, pero debe ser en otro lugar.

-¿Cómo demonios puedo confiar en ti? Con todo lo que ella ha dicho, nadie es de fiar.

-No harìa nada que dañara a tu hermana, o a ti.

   Soren se acercó a nosotros, le dije que todo estaba bien y que por favor nos llevara a mi apartamento, el grandullón dudó  y se escudó en que no era un lugar seguro. Declan le dijo que no pasaría nada, yo sólo le saqué la lengua a Soren en broma. Le había ganado, además ya echaba de menos mi apartamentito.
   Lo que sea que este hombre tenga qué decir no debe ser peor que lo que Amanda me contó.
   Declan dijo que ya se había encontrado con ella, no dio detalles, pero en cuanto estuvimos en mi apartamento le pregunté dónde se encontraron.

-Hace dos días. En casa de Viktor Strauss.-respondió. Me senté y lo mirè con desconfianza.-Escucha, para Amanda también fue una sorpresa verme allí. Llevo años enfermo de ira por lo que ese bastardo le hizo, y quiero devolverle el golpe; el año pasado estuve en Berlìn y me presentè en sus oficinas, le dije quién era yo y lo primero que hizo tras eso fue preguntar por ustedes.

-Ese viejo está obsesionado con Amanda.-dije, recordando a Vit.

-Es un amor enfermizo, Amara.

-No me llames asì. Por favor.-Él asintió, creo que entendió mis razones sin necesidad de decírselas.-Querías entrar a su círculo de confianza como Amanda lo ha hecho.

-Y la única forma de hacerlo es darle lo que pide.

-¿Le darás a mi hermana?

-No, te entregaré a ti.

   Me levanté con intención de atacarlo y salir corriendo, pero lo pensé mejor y tan sólo caminé hacia la ventana.

-Viktor Strauss sospecha de ti, Luna. Y tras ese tiroteo donde ese hombre te mencionó  no deja de pensar en que tù eres a quien él busca; y de paso lo llevarás con tu hermana, o eso es lo que planea. Me ordenó ganarme tu confianza.

-Y eso es lo que haces al contarme todo esto.

-Tengo un plan.-Me di la vuelta.-Aún no se lo he dicho a Amanda, pero si queremos salvarla de sí misma ella no debe saberlo porque no querrá aceptar, no podemos permitir que sea ella quien mate a Viktor. 

-¿Qué tienes en mente?

-He estado trabajando para tu padre, para tu verdadero padre. Y creo que sè quién puede hacerse pasar por ti frente a Viktor y de paso, asesinarlo; de ese modo derrumbamos a una de las torres de la Triada.

   Trillizos.... La hija favorita de papito querido...

-He convivido con ella: Sahar Cassul. Tu hermana.

-Es una locura, ni siquiera sabes si estará dispuesta a ayudar.

-Lo hará. No sabe de tu existencia pero si le digo la verdad, y le cuento que tanto tù como Amanda están en riesgo no dudará en ayudarnos, asì tenga que ir en contra de tu padre y todo lo que me ha enseñado. Y eso significa la muerte; pero ella también harìa lo que fuera por sus hermanos, la sangre es primero. La lealtad es sagrada, asì fuimos entrenados, educados bajo las enseñanzas de tu padre.

   Declan lucía desesperado, y lo vi... Vi lo que ocurría.

-La amas.-dije, sonriendo muy quedo.- Amas a Amanda.

-Tanto o más de lo que se puede amar a alguien, Luna. Estoy dispuesto a traerla de vuelta, y sè que tù también; ¿qué dices?

-Si ella acepta.-dije, meditando su plan.-¿Nadie debe saber del cambio?

-Nadie, debe ser convincente.

    Bastian.... 
    Esto seguro va a ser peligroso....
    Bastian....

-¿Por qué no lo matas tù mismo? Tienes la oportunidad, y sè que Amanda no lo ha hecho porque quiere torturarlo, hacerle sentir lo que ella sintió. Lo que sentimos...-Yo ya había tomado mi decisión, pero quería saber.

-Cuando Amanda me contó lo sucedido me hizo prometer que no iría tras Viktor, que no lo mataría porque no quería que me perdiera como ella, hay cosas de mí que Amanda no sabe.-dijo, me recordó a Amanda. Declan lleva mucho lastre a cuesta, eso era evidente.-Terminé haciendo la promesa.

  Y  yo no iba a dejar que la rompiera.....

-Hagamoslo.