Soy como las hojas en Otoño Viajo con el viento susurrante llevando un mensaje, acariciando rostros Dejando rastros de mi presencia donde voy Nómada a la que se le escaparon algunas ideas entre lágrimas de paz dentro de esta tormenta donde me encuentro conmigo misma, y acepto lo que venga, y acepto quien Soy, y lucho por estos dos caminos que se encuentran, que se unen...
Al final nuestro Cielo aún es Azul Permanece ese límpido Azul bajo el cual viajo con el viento susurrante llevando un mensaje, acariciando rostros Dejando rastros de mi presencia donde voy, nómada....
Yaces sentada en la cama con la espalda apoyada en la cabecera, estás desnuda pero vestida como siempre lo estamos la una con la otra.
Voy saliendo del cuarto de baño soltándome la coleta, llevas esa camisa roja de cuadros que tanto adoro verte puesta. Estás pensativa mirando mi maleta negra abierta en un sillón; tomo la ropa de pijama que usaré para dormir, una de tus sudaderas.
Levantas la vista cuando me saco el albornoz para cambiarme, una sonrisa aparece en tus labios al verme ya puesta una de tus prendas de vestir; sé que tus ojos a través de esas gafas no se acostumbran a mi presencia, no lo puedes creer aún, todavía lo ves como un imposible, todavía crees, en aquella madrugada, que soy ese alguien a quien no puedes tener o a quien no creíste que tendrías alguna vez.
Me siento en tu regazo con las rodillas a cada lado de tus muslos, me acerco más a ti y siento tus manos en mis caderas. Las mías se sitúan en tus muñecas, aparto tu mano izquierda, no es que no quiera que me toques, al contrario, me encanta que me toques, Bonita, pero quiero hacer algo, acerco tu muñeca a mis labios y la beso subiendo la manga para hacer lo mismo por cada trozo de piel que va quedando descubierta, mis labios presionan suavemente en tu antebrazo, contienes la respiración, te miro, mi mano aún sujeta tu brazo izquierdo, mi dedo pulgar se pasea en círculos allí en una caricia y llevo a cabo el mismo procedimiento en tu otro brazo. Beso tu muñeca, otro beso más arriba, uno más, suave, cuidadoso, amoroso.....
Me encanta tu piel, me encantan tus manos, sonrío cuando la derecha se posa en mi mejilla, me encantan tus manos, éstas que sostuvieron dos vidas por separado y las sostienen ahora juntas, éstas que acarician, que abrasan mi piel, y con quien abrazas a quien quieres, éstas manos tuyas las adoro....
Y de un momento a otro escondes tu rostro en mi cuello, te escucho sollozar, y te abrazo y me abrazas fuerte contra ti.
Yo no sé quererla de otra forma, pienso...
Yo no sé quererte de otra forma, susurro, de otra forma que no sea adorándote, adorando cada parte de ti....
Eres mi templo, mi galería, mi única religión, mi piano, mi lienzo, y eres dueña de ti misma, de mis noches, de mis días, porque eso eres....
Eres cada noche, y eres cada día...
Yo no sé querer de otra forma, no conozco otra forma de amor, de amar, desconozco esa de la que tanto han enseñado en la ficción llevada a la realidad, desconozco ese tipo de amor, yo no sé querer de esa forma, como posesión, no....
Yo no sé quererla de otra forma, pienso cuando buscas mi boca entre lágrimas, y sé que no sabe lo que es que la quieran así, que la adoren, que adoren cada parte de ella, pero es que Soy así, Soy en Ella y Ella en mí..... Déjame enseñarte, y déjame aprenderte, y déjame ser parte de ti, y sé parte de mí....
Yo no sé querer de otra forma, y todo lo que escribo y Creo lleva tu nombre....
El brillo de esa luna nos baña mientras mi respiración acompaña a la tuya, acompasadas.... ¿Te cuento una historia sin emitir sonido? No empezaré con Había una vez.... ....la repartiré en capítulos diseminados por tu cuerpo, el primero en tu frente en forma de beso, transmitiendo las primeras frases de las protagonistas: -Eres la visita inesperada, entras sin llamar a la puerta de un intento de escritora cuya inspiración extraviada encuentra a la luz de tus ojos... -No intentes convencerme con tu puta labia-sonríe la musa conocedora y satisfecha de ser su aliento, de iluminarla y provocarla, estimulando su imaginación. Adoraba jugar con su imaginación-. Me pintas entre letras, de la A a la Z, acariciando cada vocal mientras me besas, ¿quizá? Pero no esta noche, no jugaré a ser tu musa... -E incluso negándote logras el efecto que quiero, y lo sabes, ya entraste en el juego.... La musa ríe y permite que ella la atraiga a su cuerpo a la luz de la luna que visita el balcón, y permite ser abrazada y en ese abrazo se sabe amada, adorada, como cada vez que sus letras la envuelven como protegiendo su tesoro más preciado, y así se sabe, afortunada como afortunada es su escritora...... Y puedo continuar un nuevo capítulo, ¿no crees? Sin embargo dejemos un Continuará... en el aire, que quiero tenerte así a la luz de la luna. Llegada la noche el mundo nos pertenece, está en nuestras manos, entre nuestros brazos, aquí donde juro una y mil veces que eres poesía, mi Arte, Sinfonía.... Aquí donde te canto la nana que escribí para ti... Llegada la noche el mundo nos pertenece, está en nuestras manos, entre nuestros brazos, allí donde cuidas cada segundo borrando distancias, gritando en el silencio aquello que no se logra expresar en palabras, aquello que vuelves música que sólo yo logro escuchar, cada nota mi suspiro y tu respiración calma, durmiente, cuando salga el sol aquí estaré.... Buenos días, Bonita Mía....
Cierra los ojos Permíteme ser sueño en blanco y negro mientras te beso a color Un Te Quiero entre mis labios y tu labio superior Cierra los ojos Permítete confiar en mí y en tu corazón Una promesa susurrada entre tu piel y el pálpito de que mañana será mejor Te prometo que aún nos quedan días por sentir, por vivir Cierra los ojos, que esto apenas inicia....
Fascinada, es apropiado decirlo, es una de las palabras más cercanas para describir cómo me tiene(s) El cielo en tus ojos, el paraíso en tu mirada tormenta, esa tempestad que lo derrumba todo desde dentro y hacia afuera pero sigo en pie y estás aquí, el sol en tu tenue sonrisa Tu sonrisa, pues eso, lugar donde empiezo y termino Mi destino, una vía pacífica Tu sonrisa, pues eso, un viaje y caída libre Mi deporte extremo favorito, tu sonrisa....
Las agujas del negro reloj que colgaba en la pared se detuvieron, el silencio fue cortado por risas y mientras tú intentabas poner la llave en el lugar correcto para abrir la puerta, yo me apoyé en la pared justo al lado de la misma; era mi habitación de hotel. Y en ese segundo podía afirmar con precisión que el tiempo se había parado, el mundo dejó de girar, conversaciones quedaron en pausa en varias casas y restaurantes, como el vuelo de las palomas de la plaza por la que pasamos, la vida dejó de correr, y nuestras risas eran la única música y ruido en el globo...
Giraste la llave, mostrándote victoriosa te acercaste a mí y sin decir nada fuiste a la conquista de mi boca....
Había (re)descubierto, en el primer roce que tus labios dieron a los míos el día que llegué, que era la única droga a la que sería adicta, y hablo de reafirmar porque ya había sucumbido a todo tu Ser, a ese roce suave y posesivo de tus labios, a tu mirada, a tu voz que susurró contra mi boca lo mucho que le gustaba oírme reír....
-Esta noche te encuentro tan libre, tan Tú-susurraste.
-Aquí me siento libre-respondí besando la comisura derecha de tu boca-, aquí en un beso contigo, justo aquí....
Con mi mano derecha te tomé de la nuca pero no intenté hacer más profundo el beso, en esa intimidad de la media luz del pasillo ya era increíblemente profundo y en él me hablabas de la canción que compondríamos entre las sábanas.
Abriste la puerta y me llevaste dentro, me quité la chaqueta cerrando con el pie la puerta, apenas cayó la prenda de cuero al piso me levantaste, rodeé tus caderas con mis piernas apoyando mi frente en la tuya, y nos respiramos, escuchamos los latidos desbocados, corazones que retumbaban volviendo a la Vida por cada segundo del tiempo detenido, por cada segundo del viaje que emprendimos lado a lado, palabra por palabra, discurso compartido, ebrias de Vida(s) que nos esperaban y no sabíamos, y no entendíamos la sensación, el latido, el sentimiento, no lo entendíamos.....
Embriagarnos de la otra, sólo eso queríamos, y transmutó...
Separaste apenas tu rostro, miraste en mis ojos como si fuese la primera vez que veías en ellos, y me encontré segura que así te veía yo todo el tiempo, como si fuese la primera vez todos los días....
Mis labios dibujaron una sonrisa, nos pasa siempre, volvemos a un punto de partida, volvemos a la Primera Vez, se siente como si nos volviésemos a conocer pero con cada vez menos muros quedan por derribar, menos candados por abrir, menos heridas que sanar y vuelves a conquistar mi boca como quien busca la droga que necesita, como quien lleva años de abstinencia me acostaste en la cama, redirigí tu destino, uno en el que no creemos, el tuyo y el mío, lo reescribimos....
Terminé vestida de piel rasgada por tus dedos, el mundo gritaba lo incompatibles de personalidades al mismo tiempo que las similitudes, el mundo nos separaba, y varios sueños siendo uno mismo rompía toda regla que distancias y raciocinios te hacían negarte a mí, mirando en lo cercano, temiendo a lo que sientes, acudiendo a lo conocido, rechazando la novedad, lo única de esta historia sobre dos corazones que palpitan como uno bajo las caricias de tus manos y las mías vírgenes a tu cuerpo...
Y sucumbiste cuando redirigí mi rumbo hacia el Sur dejando huellas muy marcadas a mi paso, un vaivén entre tus caderas y mi boca, sensaciones que sacuden los sentidos elevándolos más allá de lo posible, volviéndonos más humanas rozando lo divino.... Y viniste a la conquista de mi boca.... -Drogame....-musitamos al unísono buscando lo mismo, la Vida en la pequeña muerte, ninguna otra droga eleva más que tu piel fundida en mi piel, dos corazones que palpitan como uno bajo las caricias de tus manos y las mías vírgenes a tu cuerpo regresando el tiempo a su estado natural, y nosotras pintando pausas entre cada caricia, cada mirada, tu sonrisa... Esa droga...
Deshojo cada sentir, poco a poco, al ritmo del viento vals Desvestí la tristeza y confusión entre pieles desconocidas, descoloridas, cuerpo sin vida me sentí Había un querer al otro lado de esta tierra, esperando por mí No sabía si era real o producto de mi imaginación A veces parecía real, otras ilusión Y contaré la historia de su dolor, de su sentir puro y profundo pero en otras pieles busca calor, atravesando con una flecha este corazón que era su constante, su hogar, elegido mil veces y más
Mente y Corazón que por momentos se niegan a mostrar fragilidad Vulnerables Vencidas Indomables Inquebrantables Sacudidas Cuánto hace el amor cuando sabes que Está, que Es Cuánto hace el miedo a amar en una persona Vulnerables Vencidas Indomables Inquebrantables Sacudidas Y contaré la historia del veneno en la punta de la flecha que llegó a atravesar el pecho, flecha sostenida en mi mano, veneno no tóxico, porque la muerte del sentir escapa cuando de amor se trata Inocentes Perversas Vulnerables Vencidas Indomables Inquebrantables Sacudidas Cuánto hace el amor cuando sabes que Está, que Es...